El Elevador Lacerda es un ascensor al aire libre que conecta la ciudad baja con la ciudad alta de Salvador de Bahía. Este inusual medio de transporte público se ha convertido en un símbolo de la ciudad.
El Elevador Lacerda de la ciudad brasileña de Salvador de Bahía es un llamativo ascensor al aire libre que conecta el centro histórico de la ciudad alta (Cidade Alto) con la ciudad baja (Cidade Baixa ), de orientación financiera y comercial.
En la actualidad, el Elevador Lacerda no sólo es uno de los medios de transporte público más extraordinarios del mundo, sino que también se ha convertido en un famoso punto de referencia y símbolo de Salvador de Bahía. También figura en nuestra lista de los 10 mejores lugares de interés de Salvador de Bahía.
Índice
IMÁGENES: Elevador Lacerda
Historia del Elevador Lacerda
El Elevador Lacerda debe su nombre a su constructor. La empresa "Antônio Lacerda" comenzó a instalar el ascensor exterior en 1869 bajo la dirección de Augusto Frederico de Lacerda.

Como Salvador de Bahía seguía creciendo, se necesitaba urgentemente una conexión rápida entre sus dos niveles. Los materiales de construcción del ascensor se importaron de Gran Bretaña.
Sólo cuatro años más tarde, el 8 de diciembre de 1873, se inauguró el Elevador Lacerda, en aquella época todavía con el poco imaginativo nombre de "Elevador Hidráulico da Conceição". No recibió su nombre actual hasta 1896.
En aquella época, el Elevador Lacerda estaba equipado con dos ascensores hidráulicos individuales, cada uno de los cuales podía transportar a 23 personas y, con sus 63 metros, era el ascensor más alto del mundo. En aquella época, se pesaba a los pasajeros antes de la salida para garantizar que no se superaba el peso máximo permitido. A principios del siglo XX, el Elevador Lacerda se convirtió a accionamiento eléctrico.
En 1930, las dos cabinas de 32 pasajeros fueron sustituidas por cuatro cabinas de 27 pasajeros, momento en el que el Elevador Lacerda también adquirió su famoso estilo Art Déco. Se construyó una segunda torre independiente para las dos nuevas cabinas. A diferencia de la primera torre, ésta está encajada en la ladera de la montaña y no es tan visible como la llamativa construcción de la primera torre, que llega hasta la parte baja de la ciudad de Salvador.
Paseo en el Elevador Lacerda

Cualquiera que visite Salvador de Bahía no debería perderse un paseo en el histórico ascensor. Por una tarifa mínima, el Elevador Lacerda sigue transportando a unos 900.000 pasajeros al mes, tanto locales como turistas.
Sugerencia: En horas punta, el tiempo de espera delante del Elevador Lacerda es de unos 15 minutos. Además, las cabinas sin ventanas están abarrotadas y bastante cargadas, ¡no aptas para claustrofóbicos!
La entrada en la ciudad alta está en la Praça Tomé de Souza, justo al lado del antiguo palacio de gobierno Palacio Rio Branco, y en la ciudad baja en la Praça Cairu. Las cabinas del Elevador Lacerda cubren un desnivel de 72 metros en 30 segundos, y esta velocidad también se nota en las cabinas.
Sugerencia: Después de subir o bajar en la parte alta de la ciudad, debería detenerse un momento y dejar vagar la mirada. Hay una vista fantástica de la Baía de Todos-os-Santos, el Mercado Modelo y el Forte do Mar al fondo.