La reluciente y blanca "Basílica del Sagrado Corazón de Montmartre", en París, ofrece una maravillosa vista sobre la capital de Francia gracias a su ubicación en lo más alto de la colina.
La reluciente y blanca "Basílica del Sagrado Corazón de Montmartre" es una magnífica iglesia de peregrinación en la capital francesa y es uno de nuestros 10 mejores lugares de interés en París.
Se encuentra en la cima de la colina que alberga el barrio de Montmartre y ofrece una maravillosa vista sobre la capital de Francia. Se puede llegar a la imponente iglesia a través de varios escalones o en tren de cremallera.
Antes de que se construyera la iglesia de peregrinación católica del Sagrado Corazón en Montmartre, había dos templos en la colina parisina durante la época romana. Una de ellas honraba al dios Marte, la otra a Mercurio. Sin embargo, debido a la relativamente temprana cristianización de esta zona, estos templos volvieron a desaparecer y dieron paso a un monasterio benedictino en la Edad Media.
El barrio parisino de los artistas, Montmartre
Incluso antes de que se convirtiera en un barrio de París en el siglo XIX, Montmartre era un lugar de encuentro popular para artistas de todo tipo, como pintores y literatos. Aquí vivieron, entre otros, personajes famosos como Renoir, Van Gogh o Picasso.
Hoy en día sigue siendo considerado el barrio de los artistas de París. Los turistas tienen la oportunidad de hacerse caricaturas o retratos directamente en el lugar por los artistas, que suelen ofrecer su mercancía en la calle.
Historia del Sagrado Corazón
La basílica del Sagrado Corazón fue inaugurada en 1919, cinco años después de su finalización debido a la Primera Guerra Mundial. El motivo de la construcción fue crear un monumento en memoria de las víctimas de la guerra franco-prusiana.
Al principio, la basílica tuvo que soportar duras críticas del mundo de la arquitectura. Se hablaba de "estructuras sin sentido", "material pálido" y "fealdad indestructible". No obstante, cada visitante debe decidir por sí mismo sobre este imponente edificio. Su estilo recuerda al de Santa Sofía en Estambul o al de la Iglesia de San Marcos en la Plaza de San Marcos de Venecia .
Visita al Sagrado Corazón
Como ocurre con la mayoría de los lugares de interés de París, el mejor momento para visitar la basílica es a primera hora de la mañana o al final de la tarde, ya que son las horas en las que hay menos gente.
A la impresionante cúpula de la iglesia, construida en estilo románico-bizantino, se llega subiendo una serie de escalones, un esfuerzo que merece la pena, ya que la vista sobre París desde esta altura es aún más fascinante. En el interior de la basílica, por cierto, la fotografía está estrictamente prohibida.
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